miércoles, 14 de diciembre de 2016

Personas

Aquel que tropieza contigo… volteas a mirarlo y sigues tu camino.
Ignorar… esa es la vida entre los caminantes del mundo. Almas gemelas en apariencia, pero que se igualan ante la indiferencia puesta en evidencia cuando uno de tantos y miles de su especie rompe su vida en el silencio sepulcral.

Se miran a los ojos, en la misma diáfana soledad donde se encuentran. El disfraz de súper héroe de la vida en rosa, es la vestimenta cotidiana del horror y del vacío gladiador de su adentros, aplastando la poca luz de esperanza alimentada por los trozos de dialogo e imágenes colectadas por la mente.

Viven en sueños de papel en medio de artefactos fríos, persiguiendo por el camino las alas del ángel salvador, llenador de bendiciones para la eternidad.

Nada ocurre en el mundo que no dicte el titiritero que muévelos hilos. La manada viaja como zombis; satisfaciendo sus necesidades más básicas en el increíble intento de llegar a la cumbre y usurpar el lugar de quien controla su contexto de lujuria y poder.

Ese Dios es tan venerado en trozos de material inerte y frio, con olor a tinta., rectángulo inmortalizador de figuras heroicas del pasado, pioneros de la rebelión que adapta el contexto a la realidad visible para todos. Escenografía configurada por el que no tiene identidad, pero su presencia esta en cualquier parte.

Vivir sobreviviendo, esquivando a los obstáculos intermitentes del camino. No tiendo la mano para no arrastrar un peso muerto. Debo llegar a la meta ambigua formada en mi mente por las necesidades externas del contexto. Piso y debo pisar al de al lado. No oigo sus gritos cuando cae en el concreto construido para los perdedores. Mi objetivo es llegar al paraíso dibujado en espectaculares del laberinto por donde vago junto con los demás. Tal vez este la salida en la siguiente vuelta; tal vez deba derrumbar más entes para acumularlos, escalarlos y saltar las paredes hacia la libertad.

Estoy seguro que me espera la luz y el bello horizonte de hacer mi voluntad una ley absoluta. Porque solo así tendré un significado para mí mismo y seré el significado para los demás. Ya no ser un “don nadie” viajando junto al montón. Tendré un valor al fin.

No lo lograra… hay que curar las heridas… hay que secar las lágrimas… pero que nadie se dé cuenta… nadie debe enterarse del dolor ajeno… ellos son felices… ellos deben sentir solo lo indispensable… no su propia naturaleza… eliminar emociones… construir las sintéticas… depender de lo que hago, soy y digo que sientan, piensen y hagan… solo mi voluntad… muñequitos de papel… mi juguete el mundo, donde mis soldados humanos no acatan más ordenes que de quien mueve sus hilos.

Sexo… drogas… dinero… la síntesis de esto… el PODER de crear los deseos en la conciencia de mi cerebros externos. Implantado ideas en las ingenuas mentes de quien se alegra de pensarlas. No más personas, son solo mis masas.

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